Los precios de la energía y del agua tienen un papel muy importante en la gestión de las empresas, buscándose soluciones innovadoras para optimizar el agua en el sector agroalimentario.
Se necesita realizar una gestión eficiente de este recurso natural, ya que además de tener una importancia medioambiental, también es de vital importancia económica y socialmente a la hora de la hora de mejorar la viabilidad y la competitividad. Por ello es necesario incrementar la productividad del agua en el sector. Puesto que el fin es poder disminuir la presión sobre los recursos hídricos, reducir la degradación ambiental y mantener o mejorar la seguridad alimentaria.
Ahorro sostenible del agua en el sector agroalimentario
- Aumentando la capacidad de riego superficial mediante la conversión hacia cultivos más eficientes en el uso del agua y con un mayor control de las malezas que compiten por el agua en los cultivos.
- Cambiando el sistema de riego superficial por un sistema de presión, aspersión o por goteo localizado, lo que reducirá el desperdicio de agua, ya que se utilizará de una manera más eficiente.
- Rediseñando los canales, el mantenimiento de tuberías y el revestimiento de las mismas, logrando reducir las pérdidas durante la conducción por evaporación del agua.
- A través de la reparación de redes y tuberías. Este procedimiento de ahorro de agua es el económicamente más ventajoso.
- Mejorando los sistemas de distribución de agua para riego, a pesar de que nos supone una mayor inversión, es uno de los métodos más efectivos.
- Construcción de estanques, pozos o reservas subterráneas que permitan reservar e incrementar la disponibilidad del agua.
- Promoviendo el reciclaje y reutilización del agua mediante el aprovechamiento del agua de lluvia.
A través de la combinación de estos métodos de riego y la innovación, se consigue una eficiencia no solo económica, sino que también afecta positivamente a la calidad de los cultivos.
España es el primer país en superficie regada de la Unión Europea, con más de 3,7 millones de hectáreas, lo que supone el 22% de la superficie cultivada y el 67% de la producción vegetal. Por lo tanto, el papel de la industria agroalimentaria es imprescindible a la hora de conseguir un mejor uso de los recursos hídricos.
En CM Barreal apostamos por la eficiencia y la inovación.