Los motores eléctricos se utilizan en una amplia gama de aplicaciones como en operaciones industriales, en sectores como la automoción, sectores agroalimentarios, sectores del reciclado, etc. En los sectores industriales, el hecho de que el motor eléctrico falle significa que los procesos de producción se detienen, lo que puede desencadenar una pérdida de ingresos e incumplimiento de los plazos. En otros entornos, también puede generar problemas de seguridad. Desde CMB os dejamos estas soluciones lubricantes para motores eléctricos.
Independientemente del uso de los motores eléctricos, estos deben funcionar sin fallos, averías o tiempos de inactividad. En caso de fallo, el tiempo para subsanarlo debe de ser rápido. Una de las soluciones que se encuentran para eliminarlos es utilizar lubricantes para motores eléctricos.
Muchos fallos de los motores eléctricos pueden ser debidos a problemas con los cojinetes, lo que implica que la lubricación adecuada sea de vital importancia para la vida útil y la fiabilidad de un motor. Las grasas, los aceites y lubricante de buena calidad no se oxidan, lo que implica que se evite la formación de depósitos que pueden afectar la vida útil de los cojinetes, reduciendo el desgaste de los cojinetes. Dejamos unos tips sobre la utilización de estos lubricantes.
No lubrique demasiado sus rodamientos
La lubricación excesiva puede hacer que la grasa o el aceite penetren en los devanados. Lo que provocará que el aislamiento se deteriore alrededor del devanado, y se produzca un arco y un cortocircuito dentro del motor con la carcasa. Este exceso también causará calor excesivo y desgaste en el rotor y el estator.
Seleccione el mejor tipo de rodamiento para su aplicación
Los cojinetes de motor eléctrico pueden tener varias configuraciones. El rodamiento específico empleado en el motor se comprueba en la placa de identificación del motor. Sin embargo, hay veces que esa información no es del todo correcta, ya que, en muchos casos, los motores se han reconstruido y los rodamientos pueden ser diferentes a la configuración original del OEM. Cada configuración impone sus propios desafíos únicos a los requisitos de lubricación y rodamientos.