Los consumidores han depositado una gran confianza en los fabricantes. Los fabricantes deben hacer todo lo posible para fomentar la confianza que se les otorga y tomar las medidas necesarias para mantenerla. Una forma de hacerlo es aplicar las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF).

¿Qué son las buenas prácticas de fabricación?

Las Buenas Prácticas de Fabricación (BPF) son un sistema que garantiza que los productos se producen. Con ellas se controlan de forma sistemática de acuerdo con las normas de calidad especificadas. Hay sistemas de BPF para todo, desde los cosméticos hasta los productos farmacéuticos y, por supuesto, los alimentos.

Las BPF examinan todos los aspectos del proceso de fabricación para evitar posibles riesgos que puedan resultar perjudiciales para los productos y los consumidores. Con estas prácticas se evita, por ejemplo, la contaminación cruzada, el etiquetado incorrecto y la adulteración.

Las buenas prácticas de fabricación en la industria alimentaria son especialmente importantes. Los consumidores esperan que las empresas tomen medidas para aumentar su responsabilidad y ofrecerles productos seguros.

¿Qué implican las BPF de la industria alimentaria?

Las buenas prácticas de fabricación pueden diferir de un sector a otro dentro de la industria de fabricación de alimentos y bebidas. Sin embargo, hay algunas prácticas generales que deben seguirse en todas las instalaciones.

Gestión de la calidad

La gestión de la calidad es un principio que se centra en garantizar que los productos fabricados sean aptos para su uso previsto. En el caso de los alimentos, esto significa garantizar que los alimentos cumplen las medidas de seguridad y calidad alimentaria de la FDA.

Saneamiento e higiene

En las instalaciones de fabricación de alimentos y bebidas, pocas cosas son más importantes que el saneamiento y la higiene. Esto abarca todo lo que puede conducir a la contaminación, incluida la ventilación, el mantenimiento de los equipos y el drenaje adecuado del suelo.

Ubicaciones adecuadas de las instalaciones

Las Buenas Prácticas de Fabricación establecen que las instalaciones de fabricación deben estar en un lugar adecuado, libre del riesgo de cualquier contaminación. Además, deben estar diseñadas para ayudar a minimizar el riesgo de posibles errores en las operaciones y deben ser fáciles de limpiar y mantener.

Equipo

Cualquier equipo dentro de las instalaciones debe estar diseñado, ubicado y mantenido adecuadamente para que funcione como es debido. También debe limpiarse y almacenarse periódicamente de acuerdo con los procedimientos adecuados.

Materias primas

Todos los materiales para la producción deben almacenarse adecuadamente según los principios del APPCC. Además, se debe disponer de un inventario adecuado que se actualiza periódicamente para garantizar la calidad.

Personal

Naturalmente, el éxito del cumplimiento de las BPF depende en gran medida del personal de las instalaciones. Todas las personas que trabajan en las instalaciones deben estar bien formadas y cualificadas. Deben tener un conocimiento de los distintos principios de las BPF y recibir una formación continua para mantener y mejorar sus habilidades laborales.

Validación y cualificación

Los pasos críticos del proceso de fabricación deben ser validados para garantizar que cumplen las directrices específicas de cualificación de las BPF. Las revisiones periódicas de este proceso también ayudarán a garantizar que la calidad del producto siga siendo alta.

Independientemente del tipo de instalación, las buenas prácticas de fabricación son fundamentales para que una empresa pueda elaborar productos de alta calidad.